Karma.
Como todo los días, el pez Juanes y sus amigos vivían tranquilamente: nadaban, bailaban y cantaban como todos los animales del mar.
Pero un día que empezó como cualquier otro día, la fiesta de los animales del mar fue interrumpido por algo muy extraño: una sombra cubría todo el fundo del mar, y ya no se podía ver nada porque la luz del sol no podía atravesar esta nube marina.
Los peses pensaron que era la ballena Athena, la sabia del mar, y quisieron ir a saludarla.
Mientras este tiempo, en un barco un pescador se preparaba para echar un liquido muy toxico en el mar. En efecto, una empresa de productos químicos le pagaron mucho para que se deshaga de un excedente de productos. Una vez que el pescados hecho el liquido en el mar, un charco de colores se formo alrededor del barco, un charco que podía fácilmente confundirse con una ballena...
Y eso es exactamente lo que ocurrió, los peses que fueron a saludar a la presupuesta ballena, al acercarse de mas en mas, se fueron sintiendo muy mal.
Cuando Juanes, que estaba mirando a distancia, se dio cuenta de lo que estaba pasando, se enfado con el pescador.
Tenía que salvar a sus amigos. Así que elaboro un plan y pensó inmediatamente en la ballena Athena. Fue a buscarla en su palacio de coral.
Después de haberle explicado el plan, la ballena y Juanes se dirigieron hacia el barco del pescador.
La ballena ingurgito todo el agua contaminado y lo escupió todo encima del barco. El pescador se fue, enfermo, y nunca mas se atrevió a hacerle daño a los animales del mar.
Los peses curaron y vivieron felices para siempre.
La moraleja: No hagas a los otros lo que no quieres que te hagan a ti.